La Fundación Tesãi busca concienciar y educar a la población masculina sobre los cuidados para prevenir el Cáncer de Próstata en el marco de la campaña nacional “Noviembre Azul”. En ese sentido, se insta a los hombres a realizarse los controles y chequeos médicos de rutina a partir de los 45 años de edad derribando la vergüenza y las murallas culturales para la detección precoz de la enfermedad que sigue siendo una de las principales causas de muerte en varones.
Entre todos los tipos de cáncer en el hombre el de próstata es el más frecuente afectando a 1 de cada 7 varones con edades de 45 a 50 años.
El Dr. Marcos Villagra, médico especialista en Urología del Hospital del Área 2 de la Fundación Tesãi explicó que la próstata es una parte del aparato reproductor masculino el cual está formado por el pene, la próstata y los testículos.
La próstata se ubica justo debajo de la vejiga y delante del recto. Tiene el tamaño aproximado de una nuez y envuelve a la uretra (el conducto por donde se vacía la orina de la vejiga). La función de la próstata es producir el líquido que forma parte del semen. A medida que los hombres envejecen la próstata tiende a aumentar de tamaño. Esto puede provocar que la uretra se estreche y disminuya el flujo de orina. “Cualquiera puede tener cáncer de próstata. A partir de los 45 años nosotros recomendamos que los hombres hagan sus chequeos al menos una vez en el año, si es que existen antecedentes familiares y 50 años si no hay factores hereditarios”, sostuvo el profesional.
La probabilidad de presentar esta enfermedad aumenta con la edad de los hombres por ejemplo los antecedentes familiares (padre, hijo, hermano), la raza también tiene incidencia ya que se ha comprobado que hay más casos en hombres afroamericanos que los de raza blanca. Inciden los factores hereditarios, la dieta, la alimentación, la falta de ejercicios, la frecuencia de relaciones sexuales”, manifestó.
SINTOMAS
Algunos síntomas de cáncer de próstata son: dificultad para orinar, flujo de orina débil o interrumpido, miccion frecuente principalmente por la noche, dificultad para vaciar la vejiga por completo, dolor o ardor al orinar, sangre en la orina o en el semen, dolor persistente en la espalda, las caderas o las pelvis, además de dolor al eyacular.
PRUEBAS DE DIAGNÓSTICO
Algunas de las pruebas que se usan comúnmente para detectar el cáncer de próstata son: antígeno prostático específico (análisis de sangre) y el tacto rectal.
SANGRE
La prueba del antigeno prostático específico mide el nivel de PSA en la sangre. El PSA es una sustancia que produce la próstata. Los niveles de PSA pueden ser más elevados en los hombres que tienen cáncer de próstata
EL TACTO RECTAL
Consiste en insertar un dedo enguantado y lubricado en el recto de un hombre para sentir si hay algo anormal en la próstata como cáncer. La palpación de la zona es una de las formas más efectivas para detectarla, así como a través del análisis de laboratorio y la ecografía. Con el tacto rectal se puede apreciar si hay nódulos o áreas de consistencia dura (leñosa) en la próstata que indican a menudo un cáncer, así como dolor a la palpación.
El cáncer de próstata es curable si es tratado a tiempo con una detección precoz.
“Hay que entender que con un control se puede llegar a tiempo, para hacer tratamientos curativos. De otro modo, el tratamiento tiende a ser paliativo y es más difícil”, precisó.
El Cáncer de próstata también se puede diagnosticar mediante una biopsia de próstata, en esta se extrae una pequeña muestra de tejido de la próstata para analizarla en un microscopio y observar si hay células cancerosas. “La biopsia hacemos dependiendo del resultado de las dos exámenes:el antígeno prostático especifico y el tacto rectal.