El 10 de setiembre se
recuerda el Día Mundial de Prevención del Suicidio por lo que se busca fomentar
en todo el mundo compromisos y medidas prácticas para evitar el suicidio. Cada
día en Latinoamérica y Europa; hay en promedio tres mil personas que ponen fin
a su vida y al menos 20 personas intentan suicidarse por cada uno que la
consigue.
El suicidio es un problema
complejo en el que intervienen factores psicológicos, sociales, biológicos,
culturales y ambientales. A nivel mundial; la prevención del suicidio es una
necesidad que no se ha abordado de forma adecuada debido básicamente a la falta
de sensibilización sobre este problema. Es evidente que la prevención del
suicidio requiere también la intervención de sectores distintos al de la salud
y exige un enfoque innovador, integral y multisectorial, con participación de
diferentes estamentos
La conducta suicida ha
venido incrementándose alrededor del mundo en el contexto de la pandemia del
COVID, agravado por el encierro,
confinamiento y la incertidumbre económica. El suicidio es reconocido por la
Organización Mundial de la Salud (OMS) como
un problema de Salud Pública.