PROFESIONALES MÉDICOS DEL HOSPITAL DEL ÁREA 2 ÍNSTAN A UNA SALUD SEXUAL Y REPRODUCTIVA RESPONSABLE, COMO COMPONENTE FUNDAMENTAL DEL BIENESTAR FAMILIAR.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) propuso esta fecha conmemorativa para impulsar una campaña de concienciación y educación, buscando sensibilizar a la población sobre los beneficios del uso de métodos anticonceptivos y consejería responsable que posibilite a las familias decidir el número de hijos, según las circunstancias sociales, económicos y personales de cada uno.
La Fundación Tesãi recuerda que la Planificación familiar, está consagrado en la constitución nacional paraguaya en su art. 61 que establece lo siguiente.
“El Estado reconoce el derecho de las personas a decidir libre y responsablemente el número y la frecuencia del nacimiento de sus hijos, así como a recibir en coordinación con los organismos pertinentes educación, orientación científica y servicios adecuados en la materia. Se establecerán planes especiales de salud reproductiva y salud materno infantil para la población de escasos recursos”.
PARTICIPACIÓN ACTIVA
En ese sentido, es importante recordar que la planificación familiar no es cosa de mujeres, por lo que también mediante el asesoramiento a la población masculina en los Servicios de Salud se busca reforzar la participación de los hombres en el tema de la atención a la salud sexual y por ende de todo lo referente a la planificación familiar.
Es fundamental promover la participación de los hombres, mediante el abordaje de la paternidad responsable concienciando y sensibilizando a la ciudadanía sobre el cuidado de la salud sexual y reproductiva, con campañas de orientación y apoyo en todos estratos socioeconómicos, principalmente de los sectores más vulnerables de la población.
SALUD SEXUAL Y REPRODUCTIVA
La familia es el fundamento de la sociedad. Se tiene que promover y garantizar su protección integral. El Día Internacional de la Planificación Familiar, tiene mucho que ver con el control de la natalidad en la población sexualmente activa, mediante el uso de métodos anticonceptivos, de acuerdo con sus intereses y circunstancias de índole económica, social y personal.
Constituye un elemento clave para el ejercicio pleno de los derechos a la salud sexual y reproductiva de la población, como un componente fundamental de bienestar y libertad de las personas.
