El glaucoma es un grupo de afecciones oculares que dañan el nervio óptico, cuya salud es vital para tener una buena vista. Este daño a menudo se produce por una presión en el ojo más alta de lo normal. El glaucoma es una de las principales causas de ceguera para las personas mayores de 60 años.
El glaucoma es un grupo de enfermedades que pueden dañar al nervio óptico del ojo. Esto resulta en alguna pérdida de la visión o en ceguera. Sin embargo, si se trata a tiempo, usted puede proteger sus ojos contra una seria pérdida en la visión.
FACTORES DE RIESGO
El principal factor de riesgo que puede desencadenar un glaucoma es la hipertensión ocular. Por lo general, esta condición ocurre porque, por diferentes causas, el humor acuoso (líquido que baña el interior del ojo) no drena correctamente y se acumula, ejerciendo una presión excesiva sobre el nervio óptico y causándole un “estrés” que no puede soportar.
DIAGNÓSTICO OPORTUNO
La clave para prevenir el daño irreversible que produce el glaucoma en el nervio óptico es el diagnóstico precoz de la enfermedad para poder controlarla antes de que siga evolucionando.
Dado que en la mayoría de los casos no provoca síntomas hasta fases avanzadas de la patología, se recomienda someterse a revisiones oftalmológicas cada dos años a partir de los 40, edad en la que se activa el proceso degenerativo del ojo y empieza a aumentar la incidencia del glaucoma.
RECOMENDACIÓN
Se recomienda evitar el exceso de harinas refinadas y de alimentos altamente procesados por su alto contenido en sodio y azúcares, en grasas saturadas y su bajo aporte nutricional. Favorecen la retención de líquidos, el aumento del azúcar en sangre e incrementan la tensión arterial
CUIDADOS
Es fundamental que se tenga en cuenta ciertos cuidados para prevenir el desarrollo de la enfermedad ocular:
-Revisión Oftalmológica Anual
-Alimentación Saludable
-Hacer ejercicio de forma regular y moderadamente
-Mucho cuidado con el sol
-Evita las lesiones oculares
-La cabeza siempre alta
-Dormir bien y con la postura correcta